Messi y Cristiano ¿El último tren?
ME EXPLICO…
Pero vaya, que ninguno se ofenda por favor, que estas líneas no pretenden cuestionar, criticar, ni mucho menos hacer esas odiosas y soporíferas comparaciones entre los astros que han dominado el fútbol en este milenio. Por el contrario, en todo caso, los quiero relacionar.Los quiero montar en un tren, juntos, uno en el que ya se han subido en tres oportunidades, pero que me temo que les pasará una sola vez más… Un tren que pasa por Rusia el año que viene, y va en dirección al Olimpo de los inmortales…
Seguro alguno dirá, ¿Y es que acaso Messi y Cristiano no son ya leyendas del fútbol? Con todo lo que han hecho durante sus carreras, con todos esos goles, récords y títulos que han ganado, ¿quién puede dudar de que ya han escrito suficientes páginas doradas en la historia del balompié?
Pues yo no. Repito, no es mi intención desmitificar a este par de Dioses.
PERO…
Pero sí muchachos, hay un “pero”.Y es que ni Cristiano Ronaldo ni Lionel Messi han ganado el Mundial. Sí, el Mundial de la FIFA, el de selecciones, el que nos segmenta la historia de nuestras vidas en períodos de 4 años, el que marca la grandeza futbolística de los países y su gente, porque somos así, para los amantes del fútbol, el Mundial lo es todo.
Es más, si sacamos la lupa, miramos los números y desempolvamos los recuerdos de lo ocurrido en Alemania en 2006, Japón&Corea 2010 y Brasil 2014, ni Messi ni Cristiano tuvieron buenas actuaciones individuales (ni colectivas) en ninguna de las tres Copas del Mundo en las que han participado.
Muchos no estarán de acuerdo conmigo, lo sé, pero la afirmación de arriba no es sólo mi opinión, ¡es que son los hechos!
Miremos al portugués por ejemplo, quién sólo ha anotado 3 goles en 13 partidos disputados en los Mundiales, todos ellos en fases de grupos y contra rivales del calibre de Irán, Corea del Norte y Ghana.
Al argentino, por su parte, le ha ido un poco mejor: llegó a una final y anotó 5 goles en 15 partidos. El primero fue en Alemania, en una goleada albiceleste de 6×0 ante Serbia y Montenegro, luego vino la sequía asiática, y el resto de los goles los marcó en la cita Brasileña ante Bosnia-Herzegovina, Irán y Nigeria. Al igual que Cristiano, todos ellos en primera ronda.
Mi punto es, que más allá de la frialdad de los números, en los tres Mundiales que han disputado, CR7 y D10S no han estado a la altura de su fama, no han tenido desempeños acordes a los que muestran en sus clubes año tras año, y sobre todo, no han asumido el rol que les corresponde: el liderazgo futbolístico y espiritual de sus seleccionados en los momentos de dificultad. Como me gusta decir, no se han echado sus países al hombro.
TREN AL NORTE
Sin embargo, los dos cracks tendrán su última oportunidad mundial a partir del 14 de Junio de 2018, pues al menos yo, no imagino a Cristiano con 37 años jugando en Catar 2022, ni siquiera con su privilegiado estado físico y sus estrictas rutinas de entrenamiento. Tampoco lo veo a Messi, que a pesar de ser más joven, no creo que pueda mantener su asombrosa velocidad hasta los 35 años de edad, por no hablar de los laberintos mentales que lo pudieran hacer abandonar la selección, esta vez de forma definitiva, mucho antes del evento Catarí.Así que, para ambos, el momento llegará pronto, en tan sólo 8 meses, cuando se encuentran al tope de sus condiciones físicas y con la madurez necesaria para afrontar el reto más grande de sus carreras. No me caben dudas de que el tren será ese, el que va al norte, pasando por Rusia y con dirección a la inmortalidad…